lunes, 25 de mayo de 2015

Wabi-Sabi para cultivar el Amor (Josue Mirena Gonzalez Ruiz)

Wabi-Sabi es un concepto japonés que se desarrolló en el siglo XV, que se aplica a la estética y a la comprensión del mundo, basado en lo fugaz y poco permanente de las cosas, y que se refiere básicamente a honrar todas las cosas viejas, rotas, usadas e imperfectas, y a ver la belleza, la historia y la perfección en ellas. El Wabi-Sabi ocupa en la estética japonesa, la misma posición que ocupan los ideales griegos de belleza y perfección en el occidente.

¿Qué importancia y aplicación puede tener este concepto en nuestras relaciones? Basado en él, Arielle Ford, conocida autora norteamericana, escribió hace un tiempo el libro Amor Wabi-Sabi: el antiguo arte de encontrar amor perfecto en nuestras imperfectas relaciones.

En su libro ella explica cómo podemos empezar a aplicarlo en nosotros y en nuestras relaciones de pareja, para cultivar el amor, buscando la belleza y la perfección en lo que allí encontramos, en vez de esperar, desear y soñar con cambiar en el otro, esas pequeñas cosas que a veces pueden exasperarnos en la convivencia cotidiana.

No estamos hablando de los grandes problemas en las relaciones de pareja, que deben ser identificados, trabajados y resueltos con prontitud para que no se interpongan en nuestro camino, sino de los pequeños detalles que surgen cuando tenemos ya una convivencia mayor con una pareja, esos detalles de la otra persona que gatillan en nosotros un montón de emociones encontradas, que con el tiempo pueden convertirse en motivos de discusión, frustraciones, y que pueden ir afectando una maravillosa relación.

Piensa en estos ejemplos: la tapa abierta del WC, la pasta de dientes que cada uno aprieta de forma diferente, las migas de pan esparcidas por la casa, la mantequilla fuera del refrigerador, las cortinas no estiradas correctamente, la conversación interminable de él con extraños cuando estás apurada, los cabellos en el lavamanos, etc. un montón de particularidades y/o actitudes que se hacen inconscientemente, que se repiten y que no cambian…

¿Qué propone el amor Wabi-Sabi?
Tal como hacen los japoneses con el Kintsugi, la forma de arte Wabi-Sabi que se dedica a restaurar cerámicas rotas con adhesivos fuertes y polvo de oro, y luego a iluminarlas con una luz especial en los museos para resaltar la belleza de la reparación, podemos mirar aquellas imperfecciones en nosotros y en nuestras relaciones, y darles un significado más amoroso, compasivo y profundo.

¿Cómo sería si en vez de enojarnos con nuestro amado cada vez que entramos a la cocina y vemos la mantequilla derritiéndose fuera del refrigerador, pensáramos: “wow, esto quiere decir que estoy con mi amado compartiendo la vida, que él está aquí, veo belleza y perfección en esta mantequilla fuera del refrigerador”?

¿Cómo sería si en vez de enojarme conmigo misma y decirme “qué torpe que soy”, cada vez que salgo a comer pasta y me mancho la ropa con salsa, pensara: “wow, esto es un signo de mi gran apetito por la vida, hay perfección, abundancia y belleza en esta mancha”?

Es dejar de buscar tanto la perfección y enfocarnos en lo bello que puede tener la imperfección en nuestra vida, en nosotros y en nuestras relaciones, para llenarnos de gratitud y amor.

Por supuesto el wabi-sabi no es un pase para permitir abusos o malos comportamientos que nos dañen. Un abuso o un mal comportamiento es por definición todo lo que a uno le haga sentir mal, y eso una pareja que nos ama debe honrarlo. Es para esas particularidades que la otra persona no hace a propósito, que son parte de su forma de ser, que no son cosas malas o ilegales, sino que a nosotros particularmente nos pueden molestar.

Un ejercicio que Arielle enseña en su libro para pasar de estar “molesta” a “disfrutar” ese detalle que nos exaspera, es el siguiente:  Escoge un comportamiento de tu pareja que te saque de tus casillas. Anota cinco a diez situaciones cuando eso sucede. Ahora pregúntate: ¿Cuántas veces más voy permitir que esto me moleste? ¿Qué gano con encontrar fallas en mi pareja? ¿Qué me pierdo cuando me molesto con esto? ¿Dónde aprendí a molestarme por el comportamiento de otras personas? Luego imagina que ese comportamiento molesto existe exclusivamente para enseñarte a  ser una persona más amorosa y compasiva. Y a continuación trata de ver y anotar tres regalos que trae ese comportamiento a ti o al mundo. P/ej: puedo ver que las migas de pan regadas por la casa, pueden ser un símbolo, no sólo de que estamos juntos, sino de mi profundo amor por él.

Para crear amor intencional y conscientemente en tu vida, te invito a comenzar a buscar todos los lugares donde podrías aplicar Wabi-Sabi en tu vida y a renunciar al perfeccionismo, porque nadie es perfecto y porque la perfección no es la meta.

Si nos preguntamos ¿por qué quise estar en esta relación al comienzo? No fue para que las cosas estuvieran perfectamente ordenadas en la casa, ni para que las cortinas colgaran perfectamente, ni para que la pasta de dientes se utilizara ordenadamente. Fue más bien para sentirme feliz al despertar en la mañana, para sentir que alguien me abraza, me besa en la mejilla y me dice “Buenos días amor, te amo”, para sentir que tengo a alguien que apoya mi total florecimiento en la vida y que me hace ser cada vez mejor persona.

Te invito a restaurar con oro esas pequeñas imperfecciones de tu ser amado, ese metal precioso que representará tu nueva comprensión de esa imperfección y tu aprecio por ella. Esa imperfección es parte del tapiz de esa unión que ambos están tejiendo, y significa que la historia de ustedes juntos está viva y presente. ¿Puedes ver la belleza que hay en ello?

Si quieres saber más acerca de cómo crear amor intencional y conscientemente en tu vida, puedes visitar la página http://ift.tt/1it2bG5.

Verónica Freire
Coach de Relacionamiento
veronica@llamaratuamor.com
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Información sobre Talleres en Centro Cultural Tribeca
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www.tribeca.cl

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Josue Gonzalez Ruiz

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