Para las mujeres de la antigua Roma era un rito, un ceremonial. Un ARTE. El agua va unida a la vida. Es imprescindible para nuestro cuerpo y cuando este entra en contacto con ella a través del baño, sin duda que es uno de esos momentos “rutinarios” más agradables del día.
Estamos solas, desnudas, refrescándonos y sintiéndonos libres por unos escasos minutos. ¿Cómo disfrutar de este acto tan cotidiano?
Cuida la piel del cuerpo dándote un baño de diosa con los mejores productos. Después utiliza una crema de lujo. Créeme andarás sobre nubes. ¡Sí, en el Olimpo!
Algunas opciones:
1.- Baño de burbujas: busca un gel relajante con un rico aroma y llena tu tina de burbujas. No solo te liberará del estrés, sino también aliviará la tensión de tu cuerpo.
2.- Gel de ducha: esta opción es perfecta para tu rutina diaria de lunes a viernes. Existen diferentes tipos de geles para baño, cada uno con distintas cualidades, aromas y beneficios. Busca el indicado para ti.
3.- Bombas efervescentes: otra increíble opción para complementar un rico baño de tina. Al contacto con el agua caliente estas pelotitas se disuelven aportando aroma y color. Ideal para recobrar la energía después de un día atareado.
4.- Saquitos de sales de baño: Son perfectos para embriagarse con su exquisita fragancia. Además, estas sales poseen minerales y otorgan un medio idóneo para cuidar nuestra piel. Un tip: las con olor a rosa sirven para recuperar la armonía y generar alegría
5.- No te olvides después del baño, nutrir tu piel con una deliciosa crema hidratante.
Seamos realistas y bajemos a la tierra, aunque no por ello vamos a renunciar a tener un baño de ensueño…
¡Un abrazo!
Doña Aurora
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Josue Gonzalez Ruiz
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